Día Mundial de los Océanos: la magia de retratar y transmitir su importancia en la naturaleza

Capturar el ímpetu del océano supone muchos retos. Lo cierto es que es una gran oportunidad para documentar su importancia y la fragilidad de la vida marina. 

Cada 8 de junio se celebra el Día Mundial de los Océanos. Una fecha perfecta para conmemorar la importancia que tienen en el planeta por su vital labor de generar oxígeno y albergar gran parte de la biodiversidad de la Tierra. 

Los océanos, además de ser el principal pulmón del planeta, tienen un sinfín de vida marina, colores, tipos de mareas y paisajes dignos de admiración. Sin embargo, con el paso del tiempo, hemos sido testigos de cómo la vida humana ha dañado el ecosistema.

Darle el sentido y la dedicación que se merece es clave para los amantes del mar, así lo asegura Paz Igualt, fotógrafa y embajadora de Canon Chile: “Mi principal inspiración es el estado actual de los océanos, ya que se encuentran al borde del colapso de tanta basura, por lo que es urgente movilizarse y hacer un trabajo colaborativo para mostrar lo que está ocurriendo en nuestros mares”.

Asimismo, los océanos son sinónimo de ímpetu con grandes olas, colores y personalidad. De hecho, eso inspiró inicialmente a Paz: “A lo largo de mi carrera he buscado capturar la mayor cantidad de azules reflejados en el mar. Y con el tiempo he ido observando el daño que hemos generado. Uso la fotografía como una poderosa herramienta para visibilizar su belleza, buscando también denunciar y sensibilizar sobre los problemas que enfrentan”.

Para ello, Paz ha buscado colaborar en distintas iniciativas que reflejen la importancia del mar y concienticen a la humanidad. “Desde 2022 estoy colaborando con Adidas Parley, haciendo limpiezas costeras. Además de desarrollar un proyecto fotográfico único, es una iniciativa ecológica que busca constatar las devastadoras consecuencias de la contaminación producida por distintos tipos de plásticos”.

Concientización sobre la ola

Además de albergar vida y generar oxígeno, los océanos son parte de actividades humanas como el surf. Y si hay alguien que sabe de ello es Rodrigo Farías, fotógrafo y embajador de Canon Chile.

“Desde que comencé mi carrera, mi principal inspiración fue registrar olas gigantes. Sin embargo, con el paso del tiempo me di cuenta que mi mensaje no se limitaba únicamente a deportistas surfeando olas, sino que también cómo muchas de ellas se encontraban constantemente en peligro, con la influencia humana detrás de ello: la contaminación, la instalación de industrias, los puertos, las caletas poco desarrolladas y el crecimiento urbano. Cada vez que regresaba a un lugar, ya no era como antes”, detalla Farías.

Para Farías los paisajes y el estilo de vida han tenido cambios tanto positivos como negativos: “La ola debe seguir ahí y debemos evitar todo lo que pueda dañarla. El mar nos brinda mucho y regula nuestro planeta. Si el océano está en mal estado, nos afecta a todos”.

Es por ello que el fotógrafo decidió ampliar su perspectiva y comenzar a explorar el entorno en el que se desarrolla la ola. 

“Comencé a conocer los acantilados, la flora, la importancia de la arena, rocas y las personas. Siento que he dejado de ser simplemente un fotógrafo de surf y me alegra que mis registros se utilicen para proyectos de conservación como los de Fundación Rompientes y Fundación Punta de Lobos, además de iniciativas y organizaciones locales que están surgiendo, pero que comparten el mismo objetivo”, asegura Farías.

Reflejando la realidad

Chile no es un país tropical ni de aguas cálidas. Farías asegura que el primer desafío es tomar el equipamiento y estar preparado para estar horas frente o dentro del mar, con condiciones climáticas adversas. 

“Las imágenes de surf pueden desempeñar un papel fundamental en la concienciación y protección de los ecosistemas oceánicos. Muchos surfistas y organizaciones están liderando esfuerzos para limpiar las playas, reducir la contaminación y velar por prácticas más responsables en la industria”, explica Farías.

Sin duda el océano es un factor vital para el equilibrio del planeta. “Los invito a que se informen, a ser conscientes con respecto a lo que está pasando en nuestros océanos. Es urgente actuar colaborativamente, además de reutilizar y reducir el consumo de plástico. Pero sobre todo, debemos replantear nuestras formas de consumo y fomentar la conciencia y la educación medio ambiental en las generaciones venideras”, concluye Paz.

Bajo su filosofía corporativa kyosei, Canon se esfuerza por fomentar las buenas relaciones con los clientes y las comunidades, así como con los gobiernos, las regiones y el medio ambiente como parte del cumplimiento de sus responsabilidades sociales, el objetivo es contribuir a la prosperidad global y al bienestar de la humanidad.

Fotografías gentileza de Paz Igualt y Rodrigo Farías.