Rapidez, seguridad y eficacia: ¿por qué la automatización está impactando en los operadores logísticos?
Durante 2024 se augura una mayor implementación de robots en todo el mundo para llenar el ecosistema de necesidades que la industria logística busca atender.
El uso de robots está siendo cada vez más visible en la cadena de suministro, con el objetivo de impulsar procesos y trabajos más ágiles y con menos errores. Es aquí donde la logística de almacenes y centros de distribución lideran la demanda de la implementación de este tipo de innovaciones.
De acuerdo con datos recientes del Instituto de Ingeniería de España, existen aproximadamente 190 robots por cada 10.000 empleos. Por su parte, la Federación Internacional de Robótica estima que para este 2024 se instalen alrededor de 600.000 nuevos robots en todo el mundo, lo que representa un aumento de 5% en comparación al 2023, mientras que el Informe Mundial de Robótica 2023, asegura que hasta octubre del año pasado se instalaron 553.053 robots industriales en fábricas de todo el mundo.
Estos datos dan una muestra de cómo la automatización está ganando terreno en las compañías, especialmente en el mundo logística, que desde la pandemia por covid-19 ha manifestado una implosión en cuanto al uso de tecnologías para agilizar, mejorar, facilitar y ordenar sus procesos.
“Sudamérica ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años en cuanto a implementación de robots. En STG hemos observado que al menos 1 de cada 10 clientes está evaluando las soluciones de robótica. La mayoría está dirigida para la logística de almacenes y centro de distribución, seguida de la automatización procesos de picking y embalaje”, explica Leonardo Navarrete, gerente comercial de STG Chile.
Pero ese impulso de evaluar soluciones de robótica emerge de una serie de necesidades que cada vez están siendo más evidentes, principalmente en los operadores logística de terceros (3PL): eficiencia en las operaciones, disminución de errores y optimización de recursos. “Los robots de picking y packing, por ejemplo, pueden procesar pedidos con una precisión cercana al 99,9%, minimizando los errores humanos y mejorando la velocidad de respuesta”, agrega el experto.
Los robots con más demanda en Chile
De acuerdo con el ejecutivo, en el país los robots con mayor demanda son los que cumplen funciones de picking y packing, seguidos de los móviles autónomos encargados de la gestión de almacenes y robots colaborativos o Cobots que trabajan en conjunto con la mano obrera en diferentes etapas del proceso logístico.
“Algunos de los robots, llamados Ranger Mover Smart, realizan el transporte de clasificación de productos, mientras que otros asisten las labores de picking bajo un cobot de asistencia en los almacenes, robots autónomos de transporte de contenedores para microfulfillment, pick a persona y transporte de producto o pallets”, comenta Navarrete.
Sin embargo, no es un horizonte cerrado para la industria, pues se espera que los próximos años se sumen nuevos proyectos para que a Chile puedan aterrizar nuevos robots que están revolucionando la industria logística a nivel mundial.
“Entre las innovaciones más prometedoras se encuentran los robots de clasificación y preparación de pedidos avanzados, equipados con sistemas de visión artificial y machine learning para identificar, clasificar y organizar productos de manera más eficiente. También se están explorando soluciones robóticas integradas con inteligencia artificial y analítica de datos, que permiten optimizar la cadena de suministro en tiempo real, anticipando demandas y ajustando procesos de manera automática”, confirma el experto.
Los robots y el trabajo humano
Aunque la innovación e implementación de tecnologías es un punto de relevancia para la industria, también es de interés la alianza o integración de la automatización con los colaboradores humanos, quienes deben ser capaces de asumir nuevas tareas con mayor grado de especialización.
“Los empleados pueden supervisar y trabajar en conjunto con los robots, realizando tareas que requieran de habilidades cognitivas, toma de decisiones y creatividad, mientras los robots se encargan de las tareas repetitivas y físicamente demandantes”, resalta Navarrete.
Los robots están diseñados para complementar las habilidades humanas y no para reemplazarlas. Por ello, es crucial promover la educación y formación continua en habilidades tecnológicas y digitales, preparando a los trabajadores para adaptarse a los cambios y aprovechar las oportunidades que la automatización ofrece. “Además, es importante establecer políticas y regulaciones que garanticen una transición justa y equitativa hacia una mayor automatización, protegiendo los derechos y el bienestar de los colaboradores y asegurando que la tecnología beneficie a toda la sociedad”, concluye el ejecutivo.
